Un factor clave en la reducción de la deforestación, que ha sido especialmente notable en la Amazonía colombiana, es el papel desempeñado por las organizaciones comunitarias.
En 2023, Colombia registró una importante reducción en las cifras de deforestación, alcanzando 79.256 hectáreas, la cifra más baja en los últimos 23 años y que, además, supera la meta del Plan Nacional de Desarrollo, que plantea una disminución del 20% cada año teniendo como línea base la deforestación del año 2021 (174.103 hectáreas).
Este descenso representa una reducción del 36% respecto al 2022 y del 54% en comparación con 2021, según señaló la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, al anunciar las cifras verificadas por el Sistema de Monitoreo de Bosques y Carbono del Ideam.
La reducción de la deforestación ha sido especialmente notable en la Amazonía colombiana, pasando de 71.185 hectáreas a 44.274 hectáreas, en 2023, y en varios Parques Nacionales Naturales (PNN), incluyendo la Sierra de La Macarena, la Serranía de Chiribiquete, Tinigua y la Cordillera de Los Picachos. Esta disminución en la pérdida de bosque se ha consolidado a través de estrategias de conservación y la implementación de políticas públicas orientadas a la sostenibilidad y protección del ambiente.
Esta tendencia también se evidenció en departamentos del Arco Amazónico: Meta, con una reducción de 57%; Putumayo, con 52%; Caquetá, con 34%, y Guaviare, con 27%.
Un factor clave en la reducción de la deforestación, ha sido el papel de las organizaciones comunitarias, quienes habitan el 57% de los bosques del país distribuidos en resguardos indígenas, territorios colectivos de comunidades negras y Zonas de Reserva Campesina (ZRC). En 2023, se identificaron 533 actores comunitarios que participan activamente en procesos de conservación y monitoreo de bosques.
Pese a las fluctuaciones en las cifras de deforestación, es evidente que Colombia ha realizado esfuerzos importantes para abordar este problema. No obstante, las causas estructurales, como la praderización para acaparamiento de tierras, prácticas no sostenibles de ganadería extensiva, infraestructura de transporte no planificada, la ampliación de la frontera agrícola, los cultivos de uso ilícito, extracción ilícita de minerales y extracción de madera (tala ilegal), continúan siendo factores críticos que requieren una atención integral.
La lucha contra la deforestación en Colombia es un desafío continuo que requiere un enfoque integral y sostenido que, si bien ha llevado a una reducción significativa en 2022 y 2023, es crucial mantener y ampliar las iniciativas en las que convergen el Estado y las comunidades para asegurar la protección de los bosques y la biodiversidad del país.La cooperación internacional, el compromiso de la ciudadanía en los territorios y la implementación de políticas efectivas son esenciales para revertir esta tendencia y asegurar un futuro sostenible para las generaciones futuras.
Desde WWF mantenemos el compromiso de seguir trabajando en articulación con las autoridades ambientales y las comunidades, para siempre encontrar alternativas de conservación enfocadas en el bienestar de las personas y los ecosistemas.
Destacamos, una vez más, la estrategia que identifica los bosques como sistemas socioecológicos, que reconoce la relación indivisible entre la naturaleza y la cultura humana. Es indispensable abordar la deforestación desde la valoración y aprovechamiento sostenible de los bosques, con iniciativas productivas que son el sustento para muchas familias en los territorios, y que promueven mejores relaciones entre sociedad y el ambiente.
Deforestación en Colombia en el 2023: la cifra más baja en 23 años
Un factor clave en la reducción de la deforestación, que ha sido especialmente notable en la Amazonía colombiana, es el papel desempeñado por las organizaciones comunitarias.
En 2023, Colombia registró una importante reducción en las cifras de deforestación, alcanzando 79.256 hectáreas, la cifra más baja en los últimos 23 años y que, además, supera la meta del Plan Nacional de Desarrollo, que plantea una disminución del 20% cada año teniendo como línea base la deforestación del año 2021 (174.103 hectáreas).
Este descenso representa una reducción del 36% respecto al 2022 y del 54% en comparación con 2021, según señaló la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, al anunciar las cifras verificadas por el Sistema de Monitoreo de Bosques y Carbono del Ideam.
La reducción de la deforestación ha sido especialmente notable en la Amazonía colombiana, pasando de 71.185 hectáreas a 44.274 hectáreas, en 2023, y en varios Parques Nacionales Naturales (PNN), incluyendo la Sierra de La Macarena, la Serranía de Chiribiquete, Tinigua y la Cordillera de Los Picachos. Esta disminución en la pérdida de bosque se ha consolidado a través de estrategias de conservación y la implementación de políticas públicas orientadas a la sostenibilidad y protección del ambiente.
Esta tendencia también se evidenció en departamentos del Arco Amazónico: Meta, con una reducción de 57%; Putumayo, con 52%; Caquetá, con 34%, y Guaviare, con 27%.
Un factor clave en la reducción de la deforestación, ha sido el papel de las organizaciones comunitarias, quienes habitan el 57% de los bosques del país distribuidos en resguardos indígenas, territorios colectivos de comunidades negras y Zonas de Reserva Campesina (ZRC). En 2023, se identificaron 533 actores comunitarios que participan activamente en procesos de conservación y monitoreo de bosques.
Pese a las fluctuaciones en las cifras de deforestación, es evidente que Colombia ha realizado esfuerzos importantes para abordar este problema. No obstante, las causas estructurales, como la praderización para acaparamiento de tierras, prácticas no sostenibles de ganadería extensiva, infraestructura de transporte no planificada, la ampliación de la frontera agrícola, los cultivos de uso ilícito, extracción ilícita de minerales y extracción de madera (tala ilegal), continúan siendo factores críticos que requieren una atención integral.
La lucha contra la deforestación en Colombia es un desafío continuo que requiere un enfoque integral y sostenido que, si bien ha llevado a una reducción significativa en 2022 y 2023, es crucial mantener y ampliar las iniciativas en las que convergen el Estado y las comunidades para asegurar la protección de los bosques y la biodiversidad del país. La cooperación internacional, el compromiso de la ciudadanía en los territorios y la implementación de políticas efectivas son esenciales para revertir esta tendencia y asegurar un futuro sostenible para las generaciones futuras.
Desde WWF mantenemos el compromiso de seguir trabajando en articulación con las autoridades ambientales y las comunidades, para siempre encontrar alternativas de conservación enfocadas en el bienestar de las personas y los ecosistemas.
Destacamos, una vez más, la estrategia que identifica los bosques como sistemas socioecológicos, que reconoce la relación indivisible entre la naturaleza y la cultura humana. Es indispensable abordar la deforestación desde la valoración y aprovechamiento sostenible de los bosques, con iniciativas productivas que son el sustento para muchas familias en los territorios, y que promueven mejores relaciones entre sociedad y el ambiente.
Fuente: https://www.wwf.org.co/?389691/Deforestacion-Colombia-2023-informe-cifras-y-causas